Anchoas en vinagre al estilo de mi madre
Rozan la perfección

0 0
Anchoas en vinagre al estilo de mi madre

Compártelo en tu red social:

O simplemente puede copiar y compartir este enlace

Añadir a Recetas favoritas

You need to login or register to bookmark/favorite this content.

Son el picoteo perfecto junto con una copita de txakoli

  • Raciones: 4
  • Media

Ingredientes

Instrucciones

¡Me pierden las anchoas! Del Cantábrico, en vinagre y con su buen trozo de pan.  Podría comerlas a cualquier hora del día… o de la noche. Hoy preparamos Anchoas en vinagre al estilo de mi madre.

De pequeña me encantaban, igual que ahora. Con el paso de los años, mi madre, me ha enseñado a hacerlas y aunque reconozco que me quedan buenísimas, cuando como las de mi ama tienen un algo diferente.

Una parte importante de ese sabor “especial” creo que tiene que ver con los recuerdos. ¿No os ha pasado nunca al  probar un plato, que os ha recordado a un momento?, ¿A  una época, a una persona? Eso me pasa a mi con las anchoas en vinagre de mi madre.

Anchoas en vinagre y recuerdos

Me recuerdan a cuando eramos pequeñas, y veía cómo las limpiaba y las preparaba para meter en el agua con sal, para  después de un tiempo limpiarlas una a una con cariño y mimo y cómo las preparaba en una fuente para que estuvieran toda la noche en  vinagre para que se quedaran blancas. Recuerdo todo el trabajo que le llevaba,  lo poco que tardábamos en devorarlas. y lo contenta que estaba ella porque nos habían gustado.

Una de las cosas que más me gustó del día en que me enseñó a prepararlas fue que las hicimos entre las dos, mano a mano y charlando de todo un poco. Hoy las preparo yo, siguiendo sus directrices.

Ama, mañana te llevo yo el tupper llenito de anchoas y me dices si he aprobado.

Antes de entrar de lleno con la preparación comentar un par de cosillas. Una vez limpias las anchoas,  hay que congelarlas un par de días o tres con motivo del anisakis, parásito que vive en el intestino de algunos pescados, y que hay que eliminar antes de empezar a preparar las anchoas.

En cuanto a tiempos de preparación hemos de tener en cuenta que hay bastantes pasos previos, limpiarlas, congelarlas, meterlas en agua con sal, luego en  vinagre toda la noche … por lo que en esta ocasión no pondré el tiempo estimado de preparación.

Bueno, sin más dilación ¿qué os parece si empezamos a preparar unas ricas anchoas en vinagre al estilo de mi madre? Seguidme!!

 

 

(Visited 3.420 times, 1 visits today)

Pasos

1
Hecho

No podrás comer sólo una

Limpiamos las anchoas quitando la cabeza y la espina. Si no tenéis mucha mano en esto de limpiar pescado y sí buena relación con vuestro pescadero podéis pedirle que os las limpie. Una vez limpias hemos de congelarlas un mínimo de 48 horas. Así que bien ordenaditas, en un tupper, las metemos en el congelador. Pasado este tiempo las descongelamos y nos disponemos a prepararlas.

2
Hecho

Separamos los lomos de la anchoa y los ponemos en un recipiente plano y alto que cubrimos con agua y un poquito de sal. La finalidad es quitar las impurezas que pueda tener el pescado. Pasada una hora, más o menos, quitamos el agua y limpiamos uno a uno los lomos.
En el mismo recipiente volvemos a poner los lomos de anchoa ya limpitos, intentando no poner unos encima de otros. Cubrimos con vinagre, yo uso de vino blanco, y un poquito de sal. Ahora han de ponerse blancas por el efecto del vinagre. Se pueden preparar a la tarde y dejar toda la noche en la nevera.

3
Hecho

El siguiente paso es quitar bien todo el vinagre del recipiente, las anchoas ya estarán blancas, las cubrimos un ratito, con agua para se vaya el exceso de vinagre. Las escurrimos bien y ya están listas para poner con el aceite.
Es preferible tener ya preparado el ajo y el perejil cortados muy picaditos.
En el tupper donde las vamos a conservar vamos poniendo una capa de anchoas, un poquito de ajo y de perejil al gusto y chorrete de aceite de oliva virgen extra que las cubra. Y repetimos tantas capas como anchoas tengamos. En cada capa hacemos igual anchoas, ajo, perejil y aceite. Acabando con aceite.

4
Hecho

Ya están listas para comer. En la nevera, tapadas, duran unos días aunque no suele darse el caso. Al menos en mi casa.
Las presentamos en un plato, con el ajito y el perejil y un chorrito del aceite que hemos utilizado. Acompañar con una buena ración de pan y una copa de tu vino preferido.
¡A disfrutarlas!

Eva Anía Blesa

Me gusta cocinar, me encanta el olor de los pimientos rojos asándose en el horno, disfruto regalando momentos a través de un plato.

Opiniones de la Receta

Todavía no hay comentarios para esta receta, utilice el siguiente formulario para escribir su opinión.
Batido de fresas 1
anterior
Batido de Fresas
Croissant de cereales con salmón ahumado
siguiente
Croissant de cereales con salmón ahumado

Escriba su Comentario